Nada más cumplir su 20 aniversario, Vincci Hoteles inaugura un nuevo establecimiento en Oporto que abrirá sus puertas el próximo 15 de junio. El hotel, con categoría de cuatro estrellas,está situado en Vila Nova de Gaia justo al lado del popular puente de Don Luis I otorgándole unas vistas incomparables del mismo y una panorámica inigualable de la ciudad.
Dentro de su controlada y meditada estrategia de expansión internacional, la cadena reafirma su apuesta por Portugal, consolidando su presencia en la ciudad de Oporto con el que será el segundo hotel de Vincci Hoteles en la ciudad y el cuarto en el país vecino. La sociedad de gestión patrimonial Caler Advisory&Asset Management, gestora del fondo de inversión RSR Singular Assets Europe, nuevo propietario del inmueble, ha gestionado la adquisición, licencias y obras de adecuación del hotel y project management hasta su entrega a Vincci Hoteles como operador del mismo. El importe total del proyecto han sido 29 millones de euros. El proyecto de arquitectura se ha realizado conjuntamente entre el arquitecto portugués José Gigante (reconocido con la medalla de la ciudad de Oporto) y el estudio de arquitectura de Barcelona GGV arquitectura.
El hotel está formado por un conjunto de distintos edificios repletos de historia, ubicados entre Rua Casino da Ponte y Rua Cabo Simão, descendiendo del Monasterio de la Serra do Pilar, otro de los emblemas de la ciudad y Patrimonio Mundial de la Unesco desde 1996. Su estructura particular dividida en varias edificaciones asentadas en una abrupta pendiente se integra perfectamente con el conjunto arquitectónico y el paisaje de este margen del río.
Vincci Ponte de Ferro dispone de 94 habitaciones, todas amplias y muchas de ellas con unas magníficas vistas al río. Se dividen entre habitaciones estándar, superiores y una suite en la última planta del hotel, con una inmejorable panorámica del Duero y Oporto.
Su propuesta gastronómica es amplia y diversa. Está compuesta por su lobby bar «Miraponte Bar«; su «Adega Wine Bar«, un espacio dedicado al culto al vino en el que degustar las referencias de la zona y su restaurante a la carta «Ponte de Ferro Restaurante«.
En la doceava planta se sitúa la terraza desde la que contemplar las magníficas vistas de la ciudad y los mejores atardeceres, al mismo tiempo que se degustan los cócteles más refrescantes y gastronomía en el «6 Ponte Sky Bar«. Durante el día, su piscina permite sobrellevar mejor el calor en verano tras un paseo por la ciudad o dejarse abandonar al astro sol en su solárium y relajarse en sus hamacas sobre los tejados de la ciudad.